El catalizador es uno de los componentes más importantes de una motocicleta, cumpliendo con un papel fundamental para su funcionamiento y para la protección del medio ambiente. Es el encargado de reducir el efecto contaminante de los gases que salen de la moto, a través de un proceso de depuración que limpia los gases haciendo que la contaminación sea mínima.
El problema de este proceso de depuración es que además de reducir los niveles de contaminación expulsados por la moto, también reduce la potencia del motor, y en función del modelo de moto y de catalizador, esta pérdida de potencia puede ser bastante elevada.
Esto lleva a que muchos conductores opten por retirar el catalizador de la moto, con el objetivo de ganar esa potencia extra que se ha perdido con la depuración. Es cierto que esta medida no es demasiado recomendable, pero también es cierto que hay ocasiones como los viajes por carretera, en las que esa potencia de más puede ser fundamental para disfrutar de una conducción más cómoda y también segura. Sin catalizador, tu moto parecerá una moto del Mundial de Moto GP.
Por ello desde Pont Grup hemos querido contarte cómo puedes quitar el catalizador tú mismo sin necesidad de acudir a un taller mecánico, con la intención de que puedas ponerlo y quitarlo cuando lo necesites de forma cómoda y sencilla. Presta atención y toma nota.
Pasos para retirar el catalizador de tu moto
Antes de nada, lo primero es saber dónde está situado el catalizador. Normalmente suele estar instalado en la parte final del tubo de escape, pero si no quieres perder tiempo te recomendamos que eches un vistazo al manual de instrucciones de tu moto para salir de dudas y que puedas ir directo al grano.
Una vez lo hayas localizado, lo siguiente será desmontar el tubo de escape. Para ello deberás hacerte con un destornillador adecuado y tener mucho cuidado. Cuando ya esté desmontado, tendrás que desencajar el catalizador haciendo presión hacia fuera, eso sí, ten cuidado y trata que salga suavemente sin llegar a romperlo.
Ya tienes el catalizador en tu mano, ahora retira el cilindro que por lo general suele ser cerámico, y que es el encargado de limpiar los gases emitidos por la moto. Una vez hayas retirado el cilindro y el catalizador esté completamente vacío, aprovecha para limpiar el tubo de escape, encájalo y vuelve a montarlo todo como al principio, siguiendo todos los pasos que realizaste para desmontarlo. Asegúrate de colocar bien todos los tornillos.
Ahora tu moto debería ganar un extra de potencia en la aceleración, y posiblemente el ruido del tubo de escape también sea superior al que hacía anteriormente, consiguiendo un sonido mucho más deportivo. Para que te hagas una idea, la mayoría de tubos de escape deportivo suelen venir ya sin catalizador, con el objetivo de ofrecer esa potencia extra y conseguir el sonido más deportivo.
Eso sí, desde Pont Grup NO recomendamos la desinstalación del catalizador de la moto, ya que aunque es cierto que tu moto ganará potencia, también es cierto que será perjudicial para el medio ambiente, hasta tal punto que incluso podrías tener problemas a la hora de pasar la revisión de la ITV.