¿Estás pensando en cambiar el tubo de escape? ✅ Ten en cuenta estos consejos para homologar el tubo de escape de tu moto sin problemas ➡️
Los escapes homologados de moto son mucho más comunes de lo que se cree. Especialmente en la actualidad, que se busca intensificar el rugido del motor a través del escape.
Por otro lado, uno de los motivos más comunes es mejorar el rendimiento de la motocicleta. De igual manera, muchos factores son incluidos a la hora de tomar la decisión de realizar modificaciones, siempre teniendo cuidado de no quebrantar ninguna ley.
Si estos cambios no se hacen de acuerdo con las regulaciones, pueden suponer un problema al pasar por la ITV, por eso, te explicamos cómo homologar un tubo de escape de moto sin problemas.
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Para entender el contexto en el que estamos, primero analicemos el escape de moto grosso modo. Se trata de una de las partes de una moto que y tiene como deber, expulsar los gases generados por la combustión del motor de explosión.
En una misma línea, consigue mejorar las condiciones del motor debido a la compresión que generan los gases del mismo en la cámara de combustión. Se trata de un componente con mucha ciencia detrás para que logre cumplir con su rol.
Si terminamos por manejar una motocicleta con escape libre, aparte de que nos ganaremos una multa, también estamos reduciendo considerablemente las capacidades que nuestro motor posee.
Asimismo, el escape también tiene la función de disminuir el ruido que genera la combustión (como la de mitigar en mayor medida, esos elementos que terminan por contaminar al medio ambiente).
Estos últimos detalles mencionados son los motivos principales para darse cuenta que los escapes homologados de moto son necesarios.
Para evitar cualquier tipo de inconveniente al efectuar un cambio en el escape de tu motocicleta debes revisar la normativa.
El escape debe estar homologado para tu modelo de moto, y esto es debido a que cada modelo presenta su propia normativa. Quiere decir que sin importar el cambio que quieras hacer, debes asegurarte de que fue diseñado específicamente para tu moto. Desde la pieza más pequeña hasta el cambio más completo, necesita homologación.
La idea de esto es que se pueda comprobar que el fabricante haya cumplido con las normas de la comunidad europea. Las características técnicas del modelo de la motocicleta, el anclaje y diseño deben ser tomados en cuenta. No tiene que excederse en emisiones, ni decibelios máximos.
Hay que tener en cuenta por ejemplo las correcciones al Db-killer, anulación del catalizador o variar en el diámetro de colectores. Cualquier fallo en relación con esta normativa hará que puedan multarte por incumplimiento de la ley.
Para pasar la prueba en la inspección técnica de vehículos se necesita tener un escape homologado. Hay muchas marcas de escapes en el mercado, todas ellas diferentes, y con sus características particulares. Lo importante es buscar el producto que sea compatible con el modelo de tu moto, porque de no ser así da igual lo que te gastes que no podrás obtener la homologación.
Según el reglamento no se considera una reforma el reemplazar el escape de una moto. Cambiar el escape de la moto es un proceso totalmente legal mientras se encuentre homologado para tu modelo de moto, así que en el momento de la inspección sólo deberás mostrar la ficha técnica de tu moto y el certificado de homologación del escape.
Existen esos tubos de escape ya homologados de fábrica que cumplen con los requisitos anteriores. Al comprar estos tubos de escape homologados nos entrega (generalmente) un documento que autentifica su homologación: el certificado de homologación del escape.
Este documento tiene incluido información del escape, e incluso en el mismo escape viene grabada su certificación. La certificación aparece con un código o numeración que lo acredita.
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Uno de esos tipos que puedes encontrar en el mercado son los escapes artesanales. Con toda esta información, surge una duda muy importante: ¿Es posible homologar un escape artesanal o sin homologación?
La respuesta rápida es sí. Pero por supuesto, ese “sí” viene está condicionado a que se debe cumplir con la normativa para la homologación y en la mayoría de los casos es un proceso muy costoso para un usuario común.
Para poder homologar un escape de moto es necesario hacer ensayos certificados por laboratorios de calidad que suelen ser muy costosos. Este proceso tiene sentido para un fabricante que ensaya su producto una sola vez y fabrica en masa para todo el mercado. En definitiva, si lo haces de forma personal sólo por la pérdida de tiempo y dinero no te merecería la pena usar un escape artesanal.
Sin embargo, hay excepciones al pasar la ITV respecto a las motocicletas antiguas. Estas no cuentan con escapes con homologación y casi siempre las pruebas se resumen en probar su nivel de ruido y las emisiones de gases.
Básicamente todos los escapes pueden ser homologados con seguridad. Lo que hace la verdadera diferencia es el coste de los ensayos que vuelven al proceso algo poco rentable.
Es evidente que al pasar por la ITV todos queremos pasar sin problemas. Llevar un escape no homologado es completamente ilegal, así que mucho cuidado con esto.
La multa por llevar un escape no homologado de moto ronda los 200 euros. Algunos usuarios por el simple hecho de no tener un escape homologado y que no esté en la ficha técnica de la motocicleta es más que suficiente para ser multado.
En estos casos, las multas son recurribles y en muchas ocasiones, el recurso termina por ganarse.
Imaginemos que tienes un escape montado de manera perfecta, posee una homologación y en general, el papeleo está correcto. Ahora, si te han dado una papeleta o multa por no llevar alguno de los componentes correspondientes, no hay nada que hacer. No hay una salvación ya que se trata de algo que está incumpliendo las normas.
Con esto presente y si bien el escape está homologado, lo más recomendable para la mente y el cuerpo es llevar la correcta documentación siempre. De esa forma, podremos mostrarle al agente o en la ITV, evitando todo tipo de molestias innecesarias.